'Los Bridgerton': Amar es más que un deber

'Los Bridgerton': Amar es más que un deber

4 Butacas de 5

Querido lector:

Muchas gracias por abrir las páginas de esta reseña virtual que has tenido el placer de descubrir. La historia que vengo a contarte va más allá de los sentimientos, las pasiones, el amor, el deber y la guerra. Es una historia mágica, en la que las emociones se escriben a flor de piel y se convierten en suspiros de una época llena de color, dolor y felicidad.

Me he puesto romántico y místico pero una vez que se descubre a Los Bridgerton, la concepción del amor me ha cambiado por completo en lo concerniente a series televisivas. La producción de Shondaland, a cargo de Shonda Rhimes, llega a Netflix el próximo 25 de diciembre. Un trabajo que es una oda al amor, al deber de encontrar esposa o esposo en una época en la que la alta clase esperaba descubrir que la felicidad es una emoción que se cincela día a día.

Chris Van Dusen es el creador de la nueva serie romántica de la plataforma de streaming, escandalosamente fantástica, capaz de erizar la piel e incluso de derretir el corazón más frío que pueda existir. Este que les escribe las líneas, siempre se ha alejado de las series de época, aunque a nivel profesional tenga que ver todo tipo de historias, en lo personal no soy target de estos proyectos, pero tras descubrir a Los Bridgerton, mi concepción de ellas ha cambiado.

Los Bridgerton es una serie romántica, aguda, crítica y por supuesto fiel a las amistades entre familias que intentar adaptarse a un modelo de vida social que pertenecía a otra época. Un círculo social en el que la Reina era la figura más importante y donde todas las jovencitas de clase alta esperaban contar con su bendición para convertirse en alguien popular que encontrara el amor. Los ocho capítulos están basados en las novelas de Julia Quinn, libros de corte rosa, que aunque algunos puedan pensar son las típicas historias pasionales, aquí hay muchas más capaz que se pueden encontrar.

Envidias, celos, la prensa sensacionalista, todo forma parte de un círculo en el que Daphne Bridgerton (Phoebe Dynevor), la hija mayor de la poderosa familia Bridgerton, es la joya de la familia que espera encontrar matrimonio y casarse por amor como hicieron sus padres. Protegida por su hermano mayor, el cual comienza a buscar pretendientes para ella, Daphne va descubriendo las capas de una sociedad en la que el interés por ser alguien de nombre supera al amor hasta que conoce al rebelde duque de Hastings (Regé-Jean Page), un soltero empedernido y el gran partido de la temporada al que desean echarle el guante todas las madres de las debutantes.

Los dos protagonistas son lo mejor de la serie. Ambos desbordan una química excelente en cada capítulo, demostrando que son dos personajes hechos el uno para el otro, bien desarrollados, capaces de dejarse llevar y que a buen seguro serán dos sensaciones para quienes se dejen cautivar por la serie. ¿Serán personajes de moda? Obviamente que sí, no solo por los diálogos sino por la contextualización de cada uno de ellos en los que capítulo a capítulo la serie va a más.

Otra de las bazas de la serie es descubrir la identidad de lady Whistledown, personaje al que pone voz la maravillosa Julie Andrews y que encarna a ese personaje de la prensa que se encarga de contar todos los chismorreos que van sucediendo en la época. Una figura que comienza a conquistar a la sociedad y que esperan día a día sus artículos y reseñas como quien se sienta a ver el próximo capítulo de su serie favorita.

Obviamente no estamos ante un proyecto que sea una obra maestra, es un notable trabajo al que le he encontrado dos carencias: la primera es sobre sus personajes secundarios, hay buenos mimbres pero necesitan ser reforzados o mejor trabajados en ¿futuras temporadas? Por otro lado algunas de las tramas, a medida que avanzan los capítulos, terminan siendo demasiado apresuradas, no dejando que se oxigenen los acontecimientos con naturalidad.

En conclusión, Los Bridgerton es la serie que tu alma y corazón piden para acabar este fatídico año 2020. Una serie llena de magia, ternura y mucha pasión, que convierten un cuento de hadas de época bordado magistralmente por sus dos protagonistas. Un producto que sin duda enamorará.