'Perfumes': aromas para la vida

'Perfumes': aromas para la vida

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La nostalgia es una de las sensaciones que tendemos en más ocasiones a sentir. Aquello de “fueron tiempos mejores” es algo que estamos acostumbrados a pensar a la espera de encontrar nuevas sensaciones que nos inspiren. Bien es cierto que cuando usamos un perfume es porque nos gusta, porque tiene algo de nosotros. Cuando conocemos a alguien, su perfume también tiene algo que nos hechiza, como la vida.

Perfumes es la nueva película de Grégory Magnel, un largometraje vital, como su aroma a esencia urbana y a buscar nuestros aciertos. Un melodrama que ahonda en lo profundo de las esencias para desgarrar las emociones del amor, la soledad, le necesidad de encontrar nuestra estabilidad y la pureza de los sentimientos.

Una historia llena de lucidez y calidez, que en estos tiempos se agradece disfrutar. La historia de Anne Wahlberg ( Emmanuelle Devos), la estrella del mundo de los perfumes capaz de crear y describir cualquier fragancia, es de esas vivencias de personas acomodadas, que se comportan como divas pero que realmente viven más solas de lo que creen. Un día conoce a Guillaume (Grégory Montel), su nuevo chófer y persona de confianza que le enseñará a plantarle cara a la vida a medida que se conocen y convierten en mejores personas.

Dos mundos diferentes pero destinados a unir sus fragancias para encontrar una estabilidad y amistad que haga emerger los sentimientos necesarios para curar el mal olor de la vida, las sensaciones que nos echan hacia atrás. Los dos protagonistas están espléndidos, cada uno en su rol, aunque sale mucho más airado Grégory Montel por su vis cómica. El actor encarna a un padre necesitado de encauzar su vida para poder ver a su hija y demostrar una estabilidad que la vida no le ha permitido encontrar.

Una película que nos vuelve a demostrar como se puede disfrutar de las pequeñas cosas, de las fragancias que hacen únicos los momentos y que siempre nos acompañarán a través de los recuerdos.