'Cuestión de sangre': un interesante, aunque irregular thriller, en el que Matt Damon brilla en un papel que le viene como anillo al dedo

'Cuestión de sangre': un interesante, aunque irregular thriller, en el que Matt Damon brilla en un papel que le viene como anillo al dedo

3´5 Butacas de 5

El viernes 13 de agosto llega a nuestros cines la nueva propuesta del director de la laureada y en mi opinión decepcionante “Spotlight”. En esta ocasión el cineasta Tom McCarthy nos brinda un thriller que deambula entre géneros, con Matt Damon haciendo el papel de padre coraje.

Matt Damon stars as “Bill” in director Tom McCarthy’s STILLWATER, a Focus Features release. Credit Jessica Forde / Focus Features

La historia de la película se centrará en Bill Baker un operario de una plataforma petrolífera, que viaja a Francia a visitar a su hija que fue aprisionada, aparentemente de forma injusta. Una vez en Francia nuestro protagonista buscará reunir pruebas para demostrar la inocencia de su hija, y por el camino conocerá a Virginie y Maya, una madre soltera junto a su hija, que le acompañarán en esta travesía.

En mi opinión un gran punto de la película es el guion, un guion que construye de forma sólida a nuestros protagonistas, y que logra combinar de forma mayoritariamente efectiva el cambio de géneros entre thriller y drama romántico. Del guion me gustaría destacar también la forma en la que se juega con la dualidad del crimen aparentemente cometido por su hija, pues habrá momentos en que el espectador dude en si realmente cometió el crimen, o Allison Baker le está diciendo la verdad a su padre, y es completamente inocente.

Las actuaciones están a un gran nivel, en especial Matt Damon interpretando a un americano muy americano, que por momentos es rudo, y por momentos tierno. La otra gran actuación es la de Camille Cottin como Virginie, madre soltera que se encontrará nuestro protagonista en Marsella, cuyas interacciones con Bill y su relación romántica, son incluso más interesantes que la parte más policiaca de la película.

Respecto a la dirección, Tom McCarthy nos brinda un trabajo solvente, y aunque quizás poco arriesgado. El diseño de sonido y la fotografía están a un gran nivel, pese a no ser necesariamente revolucionario.

Algo que quizás lastra la película es la excesiva duración y su ritmo descompensado, pues pese a que en gran parte pasa volando, el intercalar entre géneros de forma tan abrupta hace que a veces decaiga algo el interés.

En definitiva, McCarthy nos trae una propuesta que mezcla de thriller y drama romántico, que, pese a no ser demasiado revolucionaria o novedosa, tiene unos personajes interesantes y bien interpretados, y se lucra de una premisa que ya hemos visto en otras ocasiones, pero que aquí es abarcada de una forma algo diferente, eso sí, sin salirse demasiado de la línea de lo ya establecido.