'Ariaferma': compasión y empatía en el lugar más insospechado

'Ariaferma': compasión y empatía en el lugar más insospechado

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Leonardo di Costanzo dirige esta película que se ubica en una prisión del siglo XIX. Esta cárcel está en un lugar de difícil acceso y, además, está siendo abandonada y los presos están siendo reubicados. En ese preciso momento es cuando tiene lugar la historia.

Al ambientarse en un lugar tan inhóspito y cruel, la atmósfera de tensión es constante. La situación se complica cuando algunos de los reclusos deben quedarse en esa prisión, casi vacía, hasta que les encuentren algún lugar para alojarles después de un problema de última hora. Con estos doce presos se quedan unos cuantos guardias de seguridad, los justos para poder controlarlos. Además, al mando de toda esta situación se queda Gaetano Gargiuolo, el guardia con más experiencia, ya que la directora de la prisión también se marcha.

En esta situación excepcional, podría parecer lógico que con tanta tensión afloraran los sentimientos más crueles y crudos, pero en ‘Ariaferma’ ocurre todo lo contrario. La obra es una reflexión sobre la compasión, la honestidad y la empatía que surgen en los momentos más inesperados. Lo que podría ser una guerra constante, se queda en un casi entendimiento entre las dos partes: los guardias y los reclusos. Al fin y al cabo, todos están “atrapados” en un lugar en el que preferirían no estar.

Así, se ve un claro duelo entre Gargiuolo, jefe de seguridad, y Lagioia, el recluso más peligroso y poderoso. Ambos mantienen una lucha por ver quién aguanta más, siempre dentro de los límites civilizados y teniendo en cuenta la situación de cada uno. Aun así, el duelo de poderes, cada uno por un lado, es claro a lo largo de la película.

Además, están interpretados por Toni Servillo y Silvio Orlando, como Gargiuolo y Lagioia respectivamente. Ambos hacen gala de un nivel interpretativo extraordinario, llevando casi todo el peso de la película ellos dos. También destacan nombre como Fabrizio Ferracane, Salvatore Striano, Roberto De Francesco y Pietro Giuliano. Por último, otro elemento que resaltar es la banda sonora. La música es un elemento fundamental dentro de la película, que acompaña y estimula constantemente la trama.

‘Ariaferma’ es una reflexión sobre los actos y las consecuencias de estos en las situaciones más difíciles. Una muestra de cómo se pueden encontrar aliados hasta en los momentos más inesperados. Sin duda, un homenaje a la bondad y el entendimiento entre las personas.