'Estocolmo 1520. El Rey Tirano': una falta de elección total de tono

'Estocolmo 1520. El Rey Tirano': una falta de elección total de tono

2’5 Butacas de 5

Cuando una película te la venden como la producción más cara de su país, suele ocurrir lo que le ha pasado a Estocolmo 1520’, que lo más destacable de la película es precisamente eso: su presupuesto. 

Grandes paisajes, una dirección de arte medieval muy visual y estética, grandes efectos especiales, mucha figuración, fotografía espectacular, buenas actuaciones… pero, amigo, eso no te asegura tener una gran película

Ya desde el primer minuto del film hay algo que no te encaja. Y es que presentar a los personajes principales parando el montaje y metiendo textos al estilo Kill Bill o Snatch en medio de un drama histórico te hace levantar una ceja sospechosamente. Seguidamente, vemos que la acción se cuenta con pantalla partida animada (tipo la Hulk de Ang Lee) lo que nos confirma que el director (Mikael Håfström) parece que va a abrazar un estilo comiquero, juvenil y post-moderno. Algo que podría resultar atrevido e interesante. 

Pero no. 

Resulta que esos recursos solo los usa a pinceladas durante la película. En el resto apuesta por una dirección muy convencional y pragmática y, claro, esto hace que la película tenga un tono totalmente desequilibrado que te saca de la historia cada vez que cambia de estilo, llegando a momentos realmente ridículos, como el baile en el gran salón, dónde creí, de verdad, que la película se había convertido en una comedia involuntaria. Este es sin duda el gran handicap de la película. Una falta total de elección de tono. Da la sensación que no se han atrevido a apostar por ningún estilo claro y la mezcla de varios deja al espectador totalmente desubicado emocionalmente.  

A su favor, hay que decir que la película es entretenida y no aburre, y además, aprendes algo de la historia negra de los países nórdicos. Pero es una pena que un suceso tan oscuro y turbio como el que cuenta se trate de manera tan simplona en el guion. Y es que la trama es un intento fallido de mezclar Kill Bill con Juego de Tronos, con unos personajes que son meras marionetas de la historia, sin apenas capas y con muy poca personalidad. Solamente hay un personaje que podría haber sido algo realmente interesante y es el verdugo del rey, pero se queda en una mera insinuación. Da la sensación de que el guion no se ha trabajado apenas y que han rodado la primera o segunda versión de éste. Es todo simple y directo, sin apenas profundidad, en una historia que tenía un potencial enorme

Efectivamente, es la película más cara de los países nórdicos y a nivel técnico se ve. Ahí no hay nada que objetar y es lo que salva la película. Por eso le voy a poner un aprobado. Pero me da rabia porque si hubieran dedicado más tiempo al guion y hubieran dado con un tono más claro en la dirección, habría sido una grandísima película y seguramente una gran saga. Sin embargo, lo que tienen es una ‘TV Movie’ muy cara, recomendable para ver mientras planchas o tiendes la ropa. Entretenida, pero totalmente olvidable.