'La primera escuela': Expandir de la educación pública

'La primera escuela': Expandir de la educación pública

3’5 Butacas de 5

El director francés Éric Besnard dirige a Alexandra Lamy y Gregóry Gadebois en este drama amable sobre el valor de la educación ambientado en la Francia de finales del siglo XIX.

Francia, 1889, Louis Violet (Alexandra Lamy) una maestra de París que enviada a un pueblo rural con la misión abrir una escuela en un lugar en el que lo único que hacen los campesinos, adultos y niños, es matarse a trabajar el campo de sol a sol.

La película es un drama amable que refleja el choque de la sociedad salida de la Revolución Francesa. Una sociedad que estaba en un proceso de cambio pero que no lo hacía a la misma velocidad en toda Francia. La maestra no sabe cómo tratar a la gente del campo y la madre del alcalde le dice que tiene que ganarse a los campesinos. El alcalde la lleva casa por casa para presentarse a las familias con niños para convencerlos de que sus hijos tienen que ir a la escuela siendo la mayoría adultos que no saben ni leer ni escribir. No lo tiene nada fácil la maestra con todos los padres porque siempre hay alguno más tozudo de lo normal. Ni menos aun cuando salga a la luz su doloroso pasado.

El reparto de la película está fantástico en general destacando a Alexandra Lamy quien da vida a una mujer luminosa y voluntariosa que oculta una pesada desgracia y que se aferra a una vocación descubierta tardíamente para seguir viviendo y a Grégory Gadebois que encarna a un hombre bueno, alcalde y maderero, que no ha tenido oportunidades en la vida y que la ha ido encarando como ha ido pudiendo. Ambos actores fueron galardonados en el pasado BCN Film Fest con los premios de mejor actriz y mejor actor.

La puesta en escena, la luz, el vestuario, los paisajes y los decorados naturales aportan realismo y los niños aportan naturalidad y ternura a la historia.

Acompañan a los dos protagonistas, Jérémy Lopez, Jérôme Kircher, Ernest Mourier o Annie Mercier entre otros.