3 Butacas de 5

El anime prosigue su tendencia ascendente con el estreno de esta película, centrada en uno de los llamados arcos del manga original, siguiendo la habitual estructura del género. Es habitual, en efecto, que los mangas se dividan en tomos, llamados arcos (centrados en personajes o tramas concretas de la historia general), y que cada uno corresponda con una temporada de la adaptación televisiva (que aglutina en gran medida la empresa Crunchyroll). Pero, cada vez más, sus estudios apuestan por estrenar directamente tal arco en formato de largometraje: así, otro ejemplo reciente es el de Guardianes de la noche: Kimetsu no Yaiba – La fortaleza infinita, cuyo tremendo éxito en taquilla valida esta estrategia. Este tipo de anime, con todo, se aparta de aquel al que los más cinéfilos estamos más acostumbrados, destacando las producciones del estudio Ghibli entre otras, pues no estamos ante largometrajes independientes, sino ante episodios extendidos, como puede ocurrir en otras sagas, conectados con otros episodios.

De ahí que el visionado de esta nueva película difícilmente puede acometerse sin haber visto antes la primera temporada de la serie, o al menos sin estar familiarizado con su premisa y sus personajes. El principal es Denji, pobre huérfano endeudado que es rescatado de una muerte segura por un perro-demonio llamado Pochita, con el que se fusiona, adquiriendo así la habilitad de transformarse en el “hombre motosierra” del título. Su cabeza y sus brazos se convierten en motosierras con las que puede defenderse y atacar a sus enemigos, y que le otorgan igualmente el poder de regenerarse tras heridas letales. Con ello hemos adelantado también la premisa, que como puede intuirse consistirá en la lucha de Denji contra otros demonios, por lo que, de hecho, se parece un poco a la antes citada Kimetsu no Yaiba. La productora, con todo, es distinta, en este caso Mappa, detalle que distingue claramente la animación, desde el diseño gráfico hasta el montaje.

Estamos aquí ante un trazo más simple y difuso, lo que se acentúa en la prolongada escena de batalla del filme, no por ello menos espectacular. De hecho, va de menos a más, tras un comienzo algo torpe (incluida una secuencia de montaje que acompaña a los créditos iniciales sin apenas ritmo), pero acabando en ese desenlace realmente impresionante. El arco de Reze se refiere al personaje demonio de turno que atosiga a Denji, relación, por llamarla de alguna manera, que pasa por varias fases, y que conecta con el otro elemento fundamental de este anime, como es el enamoramiento incontrolado y juvenil de Denji. Este, de hecho, enmarca quizá la secuencia más memorable de la película al margen de toda la acción sin tregua de su segunda parte: la de la cita entre Denji y otra chica, Makima. En cualquier caso, no hay que buscar aquí un anime emotivo, sino algo entre la comedia (pueril) y la aventura (unidireccional), con todo ese componente fantástico que es también la regla del género.

