'Una gran mujer': Una intensa historia de afectos de posguerra

'Una gran mujer': Una intensa historia de afectos de posguerra

4´5 Butacas sobre 5

Llega a los cines españoles Una gran mujer, la película que le valió a Kantemir Balagov el premio a Mejor Dirección en el último Festival de Cannes.

La historia se sitúa en un Leningrado devastado tras la Segunda Guerra Mundial. Tras el asedio (uno de los peores de la Historia), los ciudadanos, sumidos en una miseria física y mental intentan volver a construir sus vidas, pero las desgracias y la muerte de la guerra siguen presentes en la cotidianeidad de la ciudad y, sobre todo, del hospital militar en el que trabaja Iya, la protagonista de esta historia. La joven intentará reunir las fuerzas para salir adelante junto a su amiga Masha, que resultó herida durante el conflicto bélico.

Con un guion que deja espacio para un silencio ocupado por una dirección impetuosa influida por un espíritu pictórico, las interpretaciones de Viktoria Miroshnichenko (Iya) y Vasilisa Perelygina (Masha) lacerantes y, por momentos, sofocantes, suponen el elemento determinante para crear el efecto de angustia que rodea el ambiente de la película.

Una gran mujer nos muestra una historia que puede llegar a ser verdaderamente desalentadora por momentos, pero que transita deslizándose hacia una tenue luz. La película es una imbricada maquinaria de afectos intensos, pero tan derrumbados y quejumbrosos como las ruinas dejadas atrás por la contienda.